
Durante la intervención, se constató la presencia de más de 400 personas dentro del inmueble, muchas de ellas menores de edad. El lugar no contaba con habilitación municipal ni medidas mínimas de seguridad. Se detectaron situaciones de hacinamiento, venta ilegal de bebidas alcohólicas, consumo excesivo de alcohol y actitudes violentas hacia los inspectores municipales y el personal interviniente.
Entre las principales irregularidades, se constató:
– Instalaciones eléctricas clandestinas.
– Cableado expuesto.
– Falta de matafuegos y señalización de emergencia.
– Ausencia de tablero reglamentario y disyuntor diferencial.
– Sin certificado de aptitud eléctrica.
– Sin habilitación comercial
Como resultado del operativo, se procedió al secuestro de equipos de sonido, luces y bebidas alcohólicas por un valor estimado de más de 8 millones de pesos. Algunos funcionarios fueron agredidos por personas presentes en el lugar.