
En declaraciones periodísticas, la madre del pequeño Giovanni Benavídez afirmó que éste fue sedado con fentanilo desde las primeras horas de vida, ya que tuvo que ser intubado por complicaciones respiratorias. Se enteró de la causa recién cuando la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) emitió la alerta.
“Nació sano, por cesárea, el 26 de abril. A las dos horas empezó con un quejido, lo bajaron a neonatología y nos dijeron que saturaba en 86”, contó la mujer.
Recordó que los médicos decidieron intubar a Giovanni y, para evitar que luchara contra el respirador, lo sedaron.
Giovanni fue diagnosticado con Klebsiella, una bacteria intrahospitalaria que se encontró en los lotes de fentanilo contaminado distribuidos por HLB Pharma y Ramallo S.A.
Las sospechas sobre el uso del fentanilo contaminado aumentaron cuando la madre notó que, al intentar acceder a su historia clínica, la misma estaba incompleta.
El de Giovanni sería el primer caso confirmado en un paciente neonatal en nuestra provincia, donde se distribuyeron más de 15.000 ampollas del fentanilo investigado. La clínica Vélez Sarsfield ya entregó al juzgado federal al menos cuatro historias clínicas de posibles casos vinculados. Una de las personas falleció.
A nivel nacional, la Justicia federal ya investiga 68 muertes por presunta contaminación bacteriana en ampollas de fentanilo.