
La Cooperativa de reciclaje «La Virgencita» funciona desde hace más de 10 años en calle Lamadrid 822 (barrio Parque), gracias al esfuerzo y sacrificio de una comunidad que desea «dar una mano» en los momentos difíciles.
Radio Estación 102.5 dialogó con Gisela y Eva Ferreyra, co-fundadoras y colaboradoras de la planta de reciclaje. Todo comenzó allí por el 2014 cuando recibieron como donaciones una prensa, una balanza, un auto elevador eléctrico y una zorrita, que les permitieron dar el primer paso y darle utilidad a aquel cartón que recolectaban.
Una década después, ya cuentan con galpón propio, prensas para reciclar cartón y papel, autoelevador y samping, entre otras máquinas, lo que marca el crecimiento que tuvo la cooperativa en estos años.
Sobre las cantidades procesadas, actualmente la carga diaria es de 2.500 kilos de cartón, siendo que disminuyó mucho con la situación actual. También ahora compran botellas de plástico, que son clasificadas color por color a la hora del reciclaje.
Cabe señalar que la organización es una fuente de trabajo de muchas familias dentro del barrio, que acercan materiales para vender y subsistir. Eva manifestó: «Lo que ganamos acá también es para ayudar a los chicos que están en la calle, que están perdidos por la droga. Con esto les hemos dado una ayuda de decirles, no vayan a robar, que busquen cartón o lo que sea y lo traen y lo compramos».
Sobre el significado que tiene la cooperativa en sus vidas, también destacó que este trabajo «salvó su vida» considerando su pasado y representaciones sociales que hay en torno a la pobreza y marginalidad. Lo mismo expresó Gisela, que recalcó el rol social y trascendental que cumplen la cooperativa de reciclaje y el comedor comunitario, donde los jóvenes del barrio reciben el almuerzo y apoyo escolar permanente.