Finalmente, como anticipó Política Córdoba Verdad, iba a ser muy difícil elaborar un documento del Encuentro provincial de la Unión Cívica Radical en Villa Giardino, por esa razón concluyeron que lo mejor que se podía producir era un «manifiesto», una expresión que sentara una posición sin demasiadas formalidades, aunque todos saben que es la expresión de sólo una de las partes, el oficialismo.
La verdad es que desde mucho antes del Encuentro estaba claro que iba a ser imposible encontrar las coincidencias y fueron varios los momentos en que peligró su realización, el problema siempre fue el debate, inconduscente desde el principio, Rodrigo De Loredo (el oficialismo) querían un Giardino funcional a Milei y el resto de los radicales cordobeses no; había una coincidencia, a medias, que salvaba el cónclave, la crítica a Llaryora. Sin un documento único, hubo siete documentos de los diferentes sectores, solo quedó el manifiesto expresando valores y con una única definición de trascendencia que dejó más dudas que certezas, «la Unión Cívica Radical tendrá un candidato o candidata a gobernar la provincia de Córdoba, para encabezar una alianza programática con fuerzas políticas afines«.
Otra curiosidad del manifiesto radical fue la definición de que “En Argentina la sociedad se dirime entre populismos de izquierda y de derecha», otorgando al kirchnerismo, si a eso se refiere por izquierda, un protagonismo que cada vez está más lejos de tener.
En relación a la provincia de Córdoba el manifiesto deloredista apuntó duramente contra Martin Llaryora con una frase muy ingeniosa: “Aprieta como libertario y gasta como Kirchnerista”, dijeron los radicales.
Y lo más interesante fue el párrafo nacional, obligado a expresarse como opositor el documento oficialista dijo: “En el plano nacional, desde nuestro rol opositor, vamos a seguir trabajando para concretar las reformas que necesita la Argentina para terminar con un status quo decadente que nos sumergió en la pobreza, defendiendo la institucionalidad, la democracia, pero anteponiendo límites infranqueables de nuestra partido como lo son la defensa de la educación pública, la salud, los derechos de los jubilados y de los sectores más postergados de nuestra sociedad que no pueden ser sobre quienes recaiga el ajuste”.
Sin documento único, con un «manifiesto» como la expresión oficial, en rigor el documento deloredista, el Encuentro de Giardino terminó como querían Rodrigo De Loredo y Mario Negri, y como sabían las minorías que iba a terminar, en definitiva todo quedó con la misma foto de siempre.
La duda que nadie puede responder es: De Loredo va a ser candidato a gobernador en 2027 en alianza con quién/es.
